El acto que se realizó en el Ateneo de Madrid el 22 de octubre, organizado por el PCPE y los CJC, fue una contundente denuncia de la represión a los/las comunistas y los sectores más conscientes del movimiento obrero.
En el acto estuvieron presentes los represaliados del Partido y la Juventud, dos de los cuales intervinieron: Sergio, que contextualizó la represión en el marco del avance de las posiciones revolucionarias y Albert, que situó el primero de los juicios que tendrán lugar sobre las organizaciones políticas de vanguardia de la clase obrera y la juventud, fijado para el primero de diciembre.
En el acto estuvieron presentes distintos sindicatos que luchan desde una perspectiva de clase: AST, CSI o SOA fueron algunos de ellos, además, otros enviaron saludos. En este bloque, entre otros, intervino Cándido.
El mundo de la cultura no fue ajeno al acto y a la represión de la dictadura del capital cada vez de forma más dura. Carlo Frabetti, Belén Gopegui, Santiago Alba o Andrés Sorel hicieron llegar su mensaje de apoyo y solidaridad.
Hubo también saludos de personas por todos conocidas, como Javier Couso.
Posteriormente se paso a los mensajes de los Partidos Comunistas: el del Partido Comunista de Cuba, Partido Comunista de Méjico, PC de Venezuela, PC de Chipre, PC Danés, Partido del Trabajo de Bélgica... y además intervinieron, allí presentes, el Partido Comunista de Grecia (KKE), el Partido Comunista de los Obreros Húngaros, el Partido Comunista de Colombia y Vía Democrática de Marruecos.
El acto contó, no podía ser de otra forma, con la intervención de Juan Nogueira y Carmelo Suárez, secretarios generales de los CJC y PCPE. La mayoría de los represaliados son jóvenes, pero como afirmó Juan, eso no va a detener la lucha de los comunistas, herederos internacionalistas de la lucha de los camaradas rusos, de la Revolución de Octubre en 1934, de la lucha antifascista española y soviética, de la Revolución de los Barbudos y de las históricas CCOO. Como aquellos camaradas, los/las militantes de los CJC no darán nunca un paso atrás.
Por su Parte, Carmelo señaló en la represión un avance del Partido y de su capacidad para enfrentar la dictadura del capital y oponerse al estado burgués, con un Partido que está cada vez más en la calle, en los conflictos obreros, en los centros de estudios, pero que cada vez está más aún del lado de la clase obrera, haciendo avanzar las posiciones revolucionarias e indicando a la clase obrera el camino correcto para destruir el capitalismo y construir el estado socialista.
Cerraron el acto, con una soberbia interpretación de la internacional a violín, mientras los asistentes la cantaban, las camaradas Laura y Marina, que habían intervenido ya a lo largo del acto y mostraron un gran repertorio de canciones revolucionarias.
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